Guarda y custodia compartida.

La mejor decisión en beneficio de los menores, siempre que sea posible.
La guarda y custodia compartida en España se refiere a la situación en la que ambos progenitores de un menor tienen la responsabilidad de cuidarlo y tomar decisiones sobre su educación, salud y bienestar en igualdad de condiciones, y el menor pasa un tiempo equivalente con cada uno de ellos.

En España, la legislación establece que en caso de divorcio o separación, la guarda y custodia de los hijos menores debe ser acordada por los padres o, en su defecto, por el juez, quien tomará en consideración el interés superior del menor. En este sentido, la ley no establece una preferencia por la custodia exclusiva de uno de los progenitores, sino que se busca promover la custodia compartida como una opción deseable en aquellos casos en que se considera que es la mejor solución para el menor.
En la práctica, la custodia compartida puede ser establecida por acuerdo de los padres o por decisión judicial. En caso de que los padres no lleguen a un acuerdo, el juez deberá evaluar diversos factores para determinar si la custodia compartida es viable y en el interés del menor, como la capacidad de los padres para cooperar y comunicarse, la disponibilidad de tiempo y recursos para cuidar del menor y la opinión del menor, si es suficientemente maduro.
La Ley establece que la custodia compartida debe ser considerada como una opción preferente siempre que sea posible y esté en el mejor interés del niño. Sin embargo, esto no significa que la custodia compartida se otorgue automáticamente en todos los casos. En lugar de ello, cada caso se evalúa de manera individual teniendo en cuenta factores como la capacidad de los padres para cooperar y comunicarse entre sí, la ubicación de sus hogares y la edad y necesidades de los hijos.
La custodia compartida también puede ser acordada de forma voluntaria por los padres sin necesidad de que se produzca una disputa legal. En estos casos, los padres pueden establecer sus propias reglas y acuerdos sobre cómo se dividirá el tiempo con los hijos y cómo se tomarán las decisiones importantes sobre su crianza y educación.
Si bien, bajo el punto de vista del interés de los menores y conforme a la jurisprudencia actual, la decisión más adecuada en beneficio de los menores es la GUARDA Y CUSTODIA COMPARTIDA al relacionarse éstos con ambos progenitores por igual, y también en beneficio de la normalización de las relaciones entre los progenitores, es importante no obstante, tener en cuenta que la custodia compartida no es adecuada en todos los casos ya que puede haber situaciones en las que no sea aconsejable, por lo que es muy importante buscar un buen asesoramiento legal y tener en cuenta las necesidades de los hijos antes de tomar una decisión sobre la custodia.